Lección de Coaching Nº 21 - Aprendizaje Ontológico
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CONTENIDO
1
INTRODUCCIÓN
2
¿DÓNDE NACE TODO?
3
DIVISIÓN DE MUNDOS
4
APRENDIZAJE VS EDUCACIÓN
5
APRENDIZAJE ONTOLÓGICO
6
NUESTRA PROPUESTA
7
¿Y ESTO PARA QUÉ?
8
CONCLUSIÓN
1 - INTRODUCCION
Todos los días estamos avanzando un paso más en nuestra vida y no es sorpresa que con el pasar del tiempo, nos llenemos de nuevas inquietudes y preguntas. El tradicional deseo que por mucho tiempo vivimos de ser mejores y más efectivos en la vida para tener todo lo que queremos y ganarnos la admiración de nuestros compañeros, de pronto pasó a segundo plano. Hoy, se habla de vivir una buena vida, sentirnos completos, pero ¿qué significa esto? Hay dolores que percibimos a medida que crecemos. Dolores de años más tempranos, de sueños frustrados, de nostalgia por algo que anhelábamos y nos prometieron que tendríamos si cumplíamos ciertos parámetros, si estábamos con la última tendencia, si teníamos altas calificaciones, si teníamos dinero; pero, aun teniendo todo eso, esa vida nunca llegó. Nuestra sociedad sufre una crisis de depresión, aunque muy poco se hable al respecto.
La forma de educar de hoy, está acabando con nuestras vidas. En el Saber de nuestra era, el ALMA no tiene espacio.
2- HISTORIA ¿Dónde nace todo?
Saber radicaba en poder referirse a las enseñanzas que se transmitían en los libros sagrados. Éstas eran verdades indiscutibles
En una época anterior al año 1500, el, no se cuestionaban ni se comprobaban. La creencia era que, si lo decía el Maestro, era palabra de Dios.
Por ese entonces apareció Copérnico – considerado amigo de la iglesia Católica -, quien al notar un patrón en el cielo se enfocó en observarlo por horas, días y meses; dándose cuenta que lo que decían los maestros y lo que él veía empíricamente en el cielo eran cosas MUY DISTINTAS. Entonces dijo: "¡La Tierra se Mueve!" y en resultado, todos se burlaron de él y lo trataron como a un loco. Después dijo: "¡La Tierra NO es el centro del universo!", y loco fue poco para el modo en que lo trataron a partir de ese momento; pues este tipo de enunciados resultaban una idea descabellada y muy peligrosa.
Al poco tiempo lograron silenciar a Copérnico; sin embargo, sus palabras fueron lo suficientemente revolucionarias para hacer eco en la mente de otros personajes curiosos. A partir de este momento la sed por saber fue en aumento y surgió un movimiento de personas que empezaron a realizar "pruebas" y a investigar; hacían uso de diversos métodos y buscaban comprobarlo todo. Con el tiempo a esas personas las llamaron científicos y el movimiento se denominó CIENCIA.
Eran tiempos de mucho revuelo y confusión. La verdad había que probarla y el propósito de la vida empezó a tomar un sentido nuevo: el querer conocer "La Verdad"; y a la verdad se le encasilló entre todo aquello que se pudiese comprobar por medio de la ciencia. Entonces, nació una nueva Era; una nueva corriente de pensamiento que marcó un antes y un después, aquello que impactó a la humanidad como nunca antes. Mirar afuera para comprobar se volvió el nuevo saber, y dejar de lado la mirada hacia nuestro interior -lo no tangible- se volvió costumbre.
3 - DIVISIÓN DE MUNDOS
El Mundo recién abierto. El Saber se concentró en lo que se podía probar. Exterior se convirtió en una Obsesión. Todos querían saber, conocer, descubrir y medirlo todo; mientras el Mundo Interior iba quedando relegado a sólo unos pocos. El aprendizaje pasó a ser solamente una acumulación de conocimientos e información. Se estudió la química y la composición de una flor, pero se dejó de lado el disfrutar su aroma. Se estudió que el colibrí bate sus alas entre 50 y 80 veces por segundo, pero se perdió el encanto de verlo flotar en el espacio frente a un pimpollo
¿Se puede tocar?
¿Se puede medir de alguna forma?
¿Hay un fundamento teórico que lo sostenga?
¿Está dentro de lo que se ve?
Si la respuesta era sí, entonces se consideraba Saber.
El aprendizaje pasó a ser solamente una acumulación de conocimientos e información.
El Mundo Interior fue convirtiéndose en imaginación: no se toca, no se mide, no se conoce cómo funciona ni se entiende. Las emociones no pueden medirse en el sistema métrico decimal. La sensación de ternura de una madre cuando abraza a su hijo no puede cuantificarse. Las lágrimas de alegría al volver a vernos no caben en una pipeta graduada. Una mirada profunda, el contacto visual de ojos con ojos no puede medirse en centímetros de distancia. El Mundo Interior y el aprendizaje se encuentran aún hoy en serios problemas. El Mundo Interno fue inmerso en una soledad infinita.
Se creó un desbalance en el saber humano, donde existe el mundo interior y el exterior. En el mundo Interior: los valores, el propósito, la conciencia y el alma Humana. En el Exterior: la técnica, la ciencia, los métodos, el tenerlo todo, las armas, la medicina y el 99% de la inversión económica mundial. Mirando estos dos mundos surge esta pregunta: ¿Cómo sería un re-aprender que incluyera el alma humana? La propuesta de este mensaje no es dejar de lado el mundo exterior, sino integrarlo con el relegado mundo interno.
PARA CONSERVAR EL EQUILIBRIO, DEBEMOS MANTENER UNIDO LO INTERNO Y LO EXTERNO; LO VISIBLE Y LO INVISIBLE; LO TANGIBLE Y LO INTANGIBLE; LO CONOCIDO Y LO DESCONOCIDO; LO TEMPORAL Y ATEMPORAL O ETERNO INFINITO; LO ANTIGUO Y LO NUEVO.
JHON O DONUENAH
4 - APRENDIZAJE VS. EDUCACIÓN
"Pienso luego existo" posterior a esta gran frase que transformó la forma occidental de comportarse frente al mundo, vinieron un sin fin de olas de pensamiento en las que la mente se transformó en el epicentro de todo lo que implica ser humano. El pensamiento, la razón y el cerebro adquirieron un valor nunca antes otorgado; el ser humano se identificó, definió y construyó a partir de la idea de ser racional, de ser pensante; y es en él -en el pensamiento- donde se depositó todo el valor de quienes somos. Entre más cosas sé, más valgo y soy "mejor".
Creamos métodos y sistemas para registrar y transmitir toda esta información. La importancia de transmitir a las nuevas generaciones la información y el modo de aplicarla se convirtió en una de las mayores preocupaciones. Se crearon discos virtuales para guardar fotos, documentos y diferentes archivos. La NUBE está inserta hoy como cosa cotidiana en nuestra vida. Y no discutimos que eso esté mal, simplemente vemos que hay más inversión en esa tecnología que en el Mundo Interior. Lo importante se volvió que todo ser humano entrara al sistema educativo para adquirir información y de este modo ser valioso para la sociedad. Sólo de ese modo podrías "ser alguien en la vida".
Creamos
un sistema con distintos niveles, estructuras y dinámicas. Vas a la escuela,
después a la universidad y al salir ya eres una persona educada. La pregunta es
¿realmente se aprende a vivir mejor después de esos pasos?, ¿sabes cuál es tu
propósito en la vida?, ¿al menos aprendiste lo necesario para trabajar?, ¿fue
hasta que ingresaste a la vida laboral donde realmente sentiste haber
aprendido? Si tus respuestas no te generan una sensación de bienestar, te
invito a que te preguntes: ¿entonces para qué nos educamos? Para hacer frente a
este fenómeno que ocurre en nuestra sociedad, hablemos un poco sobre lo que
sostiene el Coaching Ontológico. Julio Olalla – considerado uno de los padres
de esta disciplina- dice que: "La gente va al colegio a aprender para poder ir
a trabajar y ganarse la vida, pero no para aprender a vivir".
A partir de ello, podemos ver que desde el Coaching Ontológico y otras disciplinas, se ha llegado a la idea de que, para que exista un aprendizaje en el ser humano, es necesario que se confluyan tres aspectos: las emociones, el cuerpo y el pensamiento. No aprendemos sólo desde la teoría, en la teoría reflexionamos y almacenamos la información, pero para que exista aprendizaje realmente, necesitamos pasar esa información por el cuerpo y las emociones; es acá donde realmente el ser humano aprende. Cuando experimentamos la aplicación de este método, nos entregamos realmente al aprendizaje; a medida que llevamos la teoría a nuestra vida diaria y la confrontamos con resultados vivenciados, tenemos la experiencia de aceptar que fallamos, que la teoría no siempre está correcta o que la entendimos mal y en la aplicación no llega el resultado esperado.
Al llevar la teoría a la práctica reinterpretamos la información, la ajustamos y volvemos a experimentar; podemos volver a errar y acá entran las emociones: nos frustramos o nos sorprendemos; con los aciertos sentimos alegría, mientras que con los fracasos u obstáculos nos enojamos. Frente a todo esto nuestro cuerpo reacciona, suda, se tensiona, se relaja, se exalta, se acelera, regula su temperatura y cada vez el proceso de aprendizaje se afianza más. A partir de llevar la teoría a la práctica es que podemos llegar al punto en que las emociones y el cuerpo son uno solo con las ideas y los conceptos, reaccionando así frente a las ideas y las experiencias. Es acá donde realmente aprendemos y es a esto a lo que llamamos:
Pasar la información por el cuerpo, ¡vivirla! Esto es lo que busca el aprendizaje desde lo ontológico. En la educación tradicional hemos perdido una emoción muy poderosa: La Alegría. Hoy se estudia con miedo, rabia, ansiedad y culpa; porque nos van a medir con una nota que probablemente esté entre el 1 y el 10.
Sabemos muy bien la emoción asociada al fracaso y nos vienen a la mente preguntas, como:
¿Si respondo mal que dirá mi profesor?, ¿Qué pensarán mis compañeros?,
¿Cuál será el castigo que recibiré por no saber, por fallar?
¿Dónde podría haber Alegría al estudiar de esta forma?
¿Dónde ha quedado el entusiasmo por aprender?
5 - Aprendizaje Ontológico
NUESTRA PROPUESTA En el aprendizaje ontológico en cambio, se ponen en juego las emociones, nuestro mundo interior, nuestra capacidad de distinguir, nuestra historia personal, la historia cultural que hemos heredado y, en especial, nuestra capacidad de estar con nosotros mismos y en absoluto silencio. Cuando estoy en silencio estoy evocando a mi mundo interior y con él, todo mi pasado; incluyendo la memoria, libros leídos, caricias, abrazos, alegrías, enojos, miedos, y la soledad infinita de saber que "Somos" solamente cuando nos conectamos con ambos mundos.
Tu mundo interior no tendría sentido si no hay algo allí afuera que te espere. Somos, cuando nos conectamos desde la profundidad de nuestra alma con todo aquello que está afuera y no deja de sorprendernos.
Cuando nos conectamos con el afuera -desde la profundidad de nuestra alma- podemos ser en el otro, meditar en el otro y hacer Coaching desde ese espacio sagrado; no por la connotación religiosa, sino por el respeto excepcional que no puede ser ofendido. Ese espacio sagrado al que muy pocas veces al día o a la semana podemos acceder, es donde surge esta conexión. A veces es un instante, una flor que cae, una caricia al llegar a casa, una felicitación, una respiración cercana, el movimiento de algunas hojas, el rompimiento de una ola en el mar.
6 NUESTRA PROPUESTA-
En el aprendizaje ontológico en cambio, se ponen en juego las emociones, nuestro mundo interior, por eso es que te invitamos a romper el patrón; te invitamos a expandir el observador actual que estás siendo y a que desafíes tus enemigos del aprendizaje. Hoy inicias un nuevo proceso y una nueva relación con tu aprendizaje; ya no vas a ingresar a clases con miedos por participar o no, de decir algo inteligente o a responder de forma adecuada.
No le conferimos el papel principal a la información que adquieras y seas capaz de retener, acá te invitamos a que disfrutes tu proceso y te animes a llevar la información aprendida a tu vida diaria, para que de este modo pases la información por tu cuerpo, viviendo y sintiendo.
Cuando te educas en un sistema de aprendizaje ontológico dejas de participar en función de una calificación o una evaluación, ya no existen respuestas correctas o incorrectas, lo que si existen son espacios de aprendizaje constante.
Tus formadores no están para medir tus capacidades e intelecto, sino para acompañarte en ese proceso de llevar la información al cuerpo y la emoción; hacer de lo externo algo interno y lograr una unión de mundos.
El coach formador te sumerge en esos espacios de reflexión personal donde puedes experimentar en carne propia cada concepto e inquietud, y darle un sentido que abra posibilidades para ti.
7 - ¿Y ESTO PARA QUÉ?
Te invito a que te veas en el siguiente ejemplo: supongmos que quieres aprender a montar en bicicleta y lees el mejor libro sobre ciclismo; aprendes a identificar las partes de la bicicleta e incluso reconoces los distintos tipos de aceites para mantenerla en óptimas condiciones; aprendes los diferentes estilos de ciclismo y te enteras sobre los mejores ciclistas del mundo. Ahora te quiero hacer una pregunta:
¿leer este libro garantiza que podrás montar una bicicleta?
Diferenciar
el aprendizaje tradicional y el aprendizaje ontológico nos hace conscientes de
que por mas información y teoría que
te compartamos, no será hasta que tomes en tus manos la bicicleta, la montes,
pedalees, pierdas el equilibrio, caigas, te levantes, aceleres, frenes y gires,
que vas a realmente aprender a andar en bicicleta.
El coach formador será aquel que te sostenga la bicicleta mientras te subes, el que te acompañará a mantener el equilibro en un principio, hasta te dará un empujón cuando lo necesites, y una vez que aprendas a andar en esta, tomará su propia bicicleta y rodaran lado a lado, sin evaluarte, sin presionarte y sin castigarte por tus caídas, peros si invitándote a que las vivas y explores desde tu mundo interior.
8 - CONCLUSIÓN
En este mundo dividido, el Coaching Ontológico nace como necesidad de conectar nuevamente esos dos mundos. El coachee -nuestro cliente- tiene hambre de saber qué más hay dentro suyo que nadie le ha enseñado hasta ahora; nuestro cliente está hambriento de querer vivir. El Coaching está al servicio de un Mundo Nuevo, no del mundo que está desplomándose como el cambio de conciencia que estamos viviendo en nuestro tiempo. El cliente, cuando fue niño, no dijo: "estoy entrando en la era de la modernidad". Entró y vivió, sin cuestionarse ni poder elegir. Eso es lo que hicimos muchos de nosotros: entramos, vivimos y no preguntamos absolutamente nada; no nos cuestionamos la forma de vivir. Eso es así y punto.
Cuando aprendemos, nos transformamos y pasamos a ser alguien distinto. Cuando aprendemos a transformarnos, aprendemos sobre nuestros estados de ánimo, nuestro relato histórico, nuestros enemigos del aprendizaje, nuestras emociones, nuestra forma de mover el cuerpo, nuestras vergüenzas y miedos; sobre nuestra arrogancia, pero también sobre nuestra grandeza y humildad.
Aprender de esta forma nos conecta automáticamente con un saber más profundo, con un conocimiento que hasta les diría es ancestral pero no teníamos idea. Los centrados que hacemos en las clases, son una llave de acceso a nuestro aprender ontológico.
La meditación es otro acceso. mindfulness Coaching (atención plena)
La toma de consciencia plena de lo interior y de lo exterior es otra forma; pero no lo mires como que ya lo sabes, déjate sorprender; habita cada territorio como si fueras por primera vez, porque si no, seguirás "comparando lo nuevo" con lo que viene de tu propia experiencia.
El aprender de hoy necesita de una emoción central:
La Perseverancia.
Necesitamos mantenernos firmes y constantes en esta manera de ser de la cual estamos hablando para aprender -como humanidad- a tomar un nuevo nivel de consciencia.
Solo debemos aceptar, escuchar, abrazar, cuestionar (preguntar) y volver a vivir.